jueves, 26 de noviembre de 2009

Durruti y Pugachev (y 3)

Lo que más me ha gustado siempre de Durruti es, lógicamente, la historia de la Columna Durruti. Hoy imagino que no era exactamente como yo la imaginaba de joven, pero sigue fascinándome esa imagen de más de dos mil milicianos avanzando de pueblo en pueblo para despojar a los terratenientes de sus tierras y repartirlas entre los campesinos. Y es que me recuerda mucho a uno de mis personajes históricos favoritos (si no, el que más), Pugachev o Pugachov, de quien incluso tengo desde hace años un proyecto de biografía novelada.

Para quien no le conozca, Pugachev vivió a mediados del siglo XVIII en Rusia y era un cosaco. Durante la Guerra de los Siete Años combatió contra los austríacos pero, terminada ésta, el zar, Pedro III, devolvió el territorio conquistado para enzarzarse en una disputa con Dinamarca que nada tenía que ver con los intereses del país. Semejante excentricidad debió ser muy frustrante para quienes habían combatido duramente en la guerra. Para colmo, poco después (seis meses de que llegara a zar), Pedro III fue depuesto por su mujer, Catalina II, después de doce años de un matrimonio fracasado por la impotencia del zar, su falta de madurez, su incapacidad política, su actitud públicamente despectiva hacia su mujer y sus amantes. El zar murió sin que se supiera a ciencia cierta de qué, aunque todo hacía pensar que había sido asesinado; también todo hacía pensar que tras ese asesinato estaba la nueva zarina, que sería después conocida como Catalina la Grande, aunque los historiadores creen que ella fue inocente.
El caso es que, tras la frustrante guerra y la desparición del zar, el cosaco Pugachev protagonizó una rebelión sólo comparable a la futura Revolución Rusa y, de hecho, casi doscientos años después, los bolcheviques gritaban el nombre de Pugachev en las calles.
Atravesó toda Rusia haciéndose pasar por el mismísimo zar Pedro y, cual Columna Durruti, pero con seguidores que se llegaron a contar por cientos de miles, fue aboliendo la servidumbre en cada lugar por el que pasaba. Este liberador de los siervos llegó hasta las mismísimas puertas de Moscú cuando, como todo gran héroe que se precie, fue traicionado por sus más allegados.
Que Pugachev acusara a Catalina de haber intentado asesinar a su marido y que afirmara que él mismo era el zar, tras haber conseguido escapar de esa cruenta muerte, debió resultarle tremendamente inquietante a Catalina que, desde luego, no tuvo piedad con él. Una vez capturado, hizo que lo llevaran a Moscú en una jaula de hierro y, tras decapitarle, su cuerpo fue troceado.
Lo cierto es que las consecuencias de esa magna y romántica rebelión de Pugachev y los siervos no tuvo buenas consecuencias, porque el miedo vivido hizo que la zarina -una mujer, por lo demás,  inteligente y de personalidad muy interesante, además de gran capacidad política y muy culta, amiga de Voltaire, Montesquieu y Diderot-, diera un giro muy conservador a su política, hasta entonces ilustrada en lo cultural y progresista en lo social.


miércoles, 25 de noviembre de 2009

Durruti y Erika (2)

Me quedo con uno de los episodios de la historia de Buenaventura Durruti que conecta perfectamente con la actualidad: el atraco al Banco de España que perpretó con el grupo "Los Solidarios". Hoy mismo se publica la noticia del juicio a Erika B., "la Robin Hood" de los bancos o de las finanzas, una mujer de 62 años, empleada de un banco de Bonn que, durante años, ha transferido dinero de las cuentas de los clientes más ricos a las cuentas de los más necesitados. En total, hizo 117 transferencias por valor de 7,3 millones de euros. A la mujer la despidieron, pero el juez la ha perdonado, dado que jamás robó un céntimo para si misma, confesó en cuanto la descubrieron y se ha ofrecido a cubrir en lo posible, con su modesta pensión, el agujero de millón y medio de dólares dejado en el banco.
Y bien, si esta mujer no es una auténtica heroína... os recuerdo algunos datos publicados este fin de semana en distintos medios: en plena crisis, la banca ha encarecido los préstamos, recortado su importe y subido las garantías; la falta de préstamos asfixia a miles de empresas y retrasa la salida de la recesión; el impago por error de 84 euros convirtió a un yesista en un moroso; las líneas del ICO (Instituto de Crédito Oficial: dinero que el Gobierno da a los bancos para que éstos lo presten a sus clientes) sólo han llegado a un 7% de los microempresarios; ocho de cada diez autónomos siguen con problemas para financiarse; entre enero y septiembre de este año, 1.826 empresas han presentado expedientes de regulación de empleo alegando problemas de tesorería o financiación, mientras el crédito de los bancos a las empresas caían en picado; en febrero, el crédito para vivienda llegó a situarse un 40% por debajo respecto al año anterior...


Todo esto por no hablar de Goldman Sachs, el banco que nombra a los ministros de Economía de Estados Unidos; que, en plena crisis, ha cuadriplicado sus beneficios y utilizado el dinero público para aumentar los sueldos de sus directivos, y cuyo presidente, Lloyd Blankfein, afirma que los banqueros hace en trabajo de dios (traduzco al latín: opus dei) en la tierra. Voy a incluir su fotografía por si queréis recortarla y utilizarla como diana para arrojar zapatos.
Es lo terrible de esta crisis: que quienes la han creado están saliendo reforzados de la crisis (en dinero y poder), dejando por el camino a los de siempre: millones de muertos por hambre en los países pobres, y miles de nuevos parados en los países ricos. En definitiva, las esperanzas que en principio se apuntaron (yo, con mi inveterada credulidad, así lo creí) de que la crisis provocara un cambio profundo en el sistema económico profundamente injusto del mundo, restando poder a las fuerzas oscuras de los banqueros y gigantes empresariales y dándoselo a los representantes democráticos (nacionalización de bancos, cortapisas a los nuevos productos financieros, cierre de paraísos fiscales...) no sólo no se han cumplido, sino todo lo contrario.
Quizá Durruti esté algo solo en su monumento. Hagamos también un monumento a Erika B. y, ¡por qué no!, a los grandes y envidiados atracadores de bancos de la historia: El Solitario, Bonnie and Clyde...


Durruti y Santa Ana (1)

Por fin tiene Buenaventura Durruti un monumento en León. Para justificarlo podrían ser suficientes las cerca de cien mil entradas que Google registra con este nombre, pero hay, por supuesto, más.

Recuerdo brevemente que nació en 1896 en León, hijo de un ferroviario. La pobreza familiar le obligó a dejar los estudios a los 14 años y hacerse mecánico. Se afilió a UGT y participó en la huelga general revolucionaria de 1917. Se trasladó en 1920 a Barcelona, donde se pasó a la CNT. Formó parte de las Milicias y creó la famosa Columna Durruti. Murió en la calle Isaac Peral de Madrid, el 19 de noviembre de 1936, de un disparo de bala. Quedémonos aquí. Todavía no se sabe ni, obviamente, se sabrá jamás, de qué mano procedió esa bala. La lista de enemigos era larga. En principio, pareció lógico suponer que lo asesinó un fascista, pero también se sospechó de los comunistas y de los propios anarquistas, en cuyo seno había duros enfrentamientos. ¿No resulta aterradora esta última posibilidad? Y, sobre todo, ¿no resulta terriblemente deprimente que esos enfrentamientos fratricidas sigan produciéndose y un grupo de anarquistas hiciera todo lo posible por boicotear la inauguración del monumento? ¿De dónde proviene el ancestral cainismo que corroe siempre a la izquierda?
Yo, en todo caso, no quiero dejar pasar la oportunidad de celebrar un acto que unió a un grupo muy heterogéneo de personas: era realmente estimulante ver a gente tan mayor, viejos antifranquistas, junto a gente muy joven.

Los responsables insistieron en que era un homenaje a todos los luchadores contra la dictadura, no sólo a una persona. La escultura -obra altruista del artista Diego Segura, financiada por la CGT y titulada "Hálito Durruti"- está enclavada en la plaza en la que nació y vivió Durruti, la Plaza de Santa Ana, antiguo barrio judío de la ciudad, entrada del Camino de Santiago y el último superviviente del León rural en el núcleo urbano, con sus soportales de madera y su pavimento de cantos rodados.




No recuerdo la fecha en la que el Ayuntamiento (creo que presidido, entonces, por Juan Morano) decidió cargarse esa bonita plaza, pero recuerdo haber mirado con tristeza las máquinas que la arrumbaron para construir feos edificios de pisos y quiero ver en esta escultura un homenaje, también, a la plaza; homenaje, como no podría ser menos tratándose de Durruti, armado de protesta.

(En las fotos, el escultor y mi amigo Manuel Durruti, sobrino de Buenaventura)

lunes, 23 de noviembre de 2009

PRISA... por ganar dinero

Todavía oigo a gente que dice cosas como: "¡Mal lo está haciendo Zapatero que hasta la SER le pone a escurrir!" o "¡qué desastre de Gobierno! ¡si hasta El País lo critica duramente!".
Recuerdo a esas personas y a quienes no se hayan enterado aún, que las críticas del Grupo Prisa al Gobierno empezaron exactamente a raíz de la aprobación del Decreto Ley para el impulso de la Televisión Digital Terretre, la liberalización de la televisión por cable y el fomento del pluralismo, con el que se eliminó el límite de tres operadores privados. En definitiva, se dio luz verde a la TDT de pago, se eliminaron las restricciones a la competencia en la radiotelevisión por cable y, por contra, se impidió que la misma persona física o jurídica pueda disponer de más del 50% de las concesiones o controlar más de cinco concesiones en un mismo tipo de medio.
El Grupo Prisa ya había amenazado con la guerra y, efectivamente, ante la decisión del Consejo de Ministros, ignorando sus presiones, decidió llevarla a cabo. El decreto ley se aprobó a finales de agosto y el 13 de septiembre esta viñeta abrió la venganza.



Últimamente, me da la impresión de que están como resignándose, pero el cambio de actitud respecto a la política del Gobierno de los medios de Prisa es, obviamente, una consecuencia, no una coincidencia. Hay mucho escrito al respecto; incluyo, a modo de ejemplo, este enlace.
http://www.internautas.org/html/5722.html


domingo, 15 de noviembre de 2009

¡HUELGA DE HAMBRE CONTRA EL HAMBRE!




El director de la FAO (Agencia de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), Jacques Diouf, se ha puesto en huelga de hambre. Es una decisión desesperada ante una situación inaceptable: ¡mil millones de personas se están muriendo de hambre y nadie está haciendo nada! Mañana, lunes, comienza una Cumbre Mundial sobre Seguridad Alimentaria. En la última que se celebró, los países ricos del mundo se propusieron reducir el hambre en el mundo a la mitad para este año. No sólo no se ha cumplido sino que el número de hambrientos se ha multiplicado. A esta cumbre ni siquiera van a acudir los principales líderes del mundo. Todo hace pensar que la cumbre no servirá para nada. Que nuestros dirigentes no están dispuestos a hacer nada... ¡y cada seis segundos muere un niño de inanición!
Ban Ki Moon, el secretario general de la ONU se ha sumado a la huelga de hambre.
Yo también. Y os pido que os unáis vosotros. La Crónica se sumará a la campaña mañana, lunes, con el director a la cabeza, en huelga de hambre. Abrirá una cuenta en la que cada persona que decida suscribir la huelga de hambre ingresaría una cantidad (la cantidad mínima para comer un día: 10 euros). Por favor, leed mañana la Crónica y difundid lo más posible esta campaña que hoy ni siquiera ha merecido una línea en los periódicos nacionales.
Si quieres solidarizarte puedes ejecutar por tu cuenta el ayuno pedido por la ONU, pero también puedes sumarte a la campaña de La Crónica enviando el  nombre y DNI bajo el epígrafe, SOLIDARIDAD CON LA FAO EN SU LUCHA CONTRA EL HAMBRE al correo electrónico lacronica@la-cronica.net o al fax 987 21 31 52.
Otra forma de solidarizarse es colaborar con un donativo de 10 euros, que sirve para alimentar a 10 personas en muchos países durante un día a la cuenta de Caja España abierta ayer número 2096 0037 17 3979280500, cuya recaudación serán también enviada a la FAO.

 POR FAVOR, ABRID LA CRÓNICAhttp://www.la-cronica.net/

http://www.la-cronica.net/2009/11/16/leon/el-director-de-la-cronica-en-huelga-de-hambre-en-apoyo-de-jacques-diouf-presidente-de-la-fao-57533.htm

http://www.la-cronica.net/2009/11/16/apoyo/yo-tambien-porque-es-inaceptable-57543.htm



Añado esta fotografía que crea un terrible contraste, enviada por Juan Vallejo, quien la tomó en una calle de Madrid.


viernes, 13 de noviembre de 2009

Contrarrevolución

Creo que no cabe duda de que la gran revolución del siglo XX fue la de la mujer. Los cambios en el status social y la vida privada de las mujeres de Occidente han sido impresionantes. Ahora, las feministas inciden en nuevos avances, como el cambio del lenguaje, pero, en mi opinión, lo más importante es hacer todo lo posible por extender esos cambios al resto del mundo, hacer todo lo posible -y no se está haciendo en absoluto- por cambiar la situación de las mujeres en países en los que permanecen absolutamente sojuzgadas. Y, por lo que se refiere a las sociedades democráticas, lo que importa ahora es no perder lo ganado, un riesgo que a mí me parece inminente en las próximas generaciones.
Las mujeres que han protagonizado los cambios están, por una parte, tan volcadas en mirar hacia adelante que no se dan cuenta de que la tierra está moviéndose debajo de sus pies y, por otra, tan acomodadas en la tarea fácil de demandar a las instituciones públicas, que no ven que las empresas privadas están haciendo una auténtica contrarrevolución.
Sólo hay entrar en una juguetería, cosa que madres, tías y abuelas haremos en pocos días para elegir los regalos navideños. Nos sorprenderá un deslumbrante fulgor rosa en la mitad de los estantes, abarrotados de los juguetes más cursis que generación alguna de niñas ha tenido jamás, en tanto el resto está cubierto de siniestras tinieblas, con monstruos, bestias y, en general, los modelos más brutales que se haya nunca presentado a los niños. ¿Juguetes sexistas no? El lema ya parece una broma.
Las niñas crecen con la ambición de ser princesas a lo Leticia, dispuestas a sufrir lo que haga falta en el quirófano para tener unas facciones dignas de una corona; o modelos que paseen sus famélicos cuerpos por la pasarela para que los diseñadores se enriquezcan; o cantantes con mejores piernas que voz. Los niños crecen con la ambición de ser los más fuertes, tener el aspecto más temible, ser los más rápidos en la carretera y, en general, los más duros.
Con semejantes modelos, ¿qué demonios importa que haya miembros y miembras?


lunes, 9 de noviembre de 2009

A modo de significativo anecdotario

Comentarios que espontáneos paseantes desconocidos, con aspecto inocente, me han hecho cuando han tropezado conmigo y con alguna de mis hijas de raza hindú.


- No tiene la piel muy oscura. De todos modos, no se preocupe, que seguro que se le va aclarando más.
- Me parece muy bien traerlos así, pequeñitos, porque luego vienen cuando son mayores y sólo vienen a robar y a matar.
- ¿Es su hija o es adoptada?
- Lo malo de los indios es que pueden parecer gitanos.
- Se ve que usted pudo elegir, porque se ha traído una con la piel bastante clara; yo las he vista casi negras.









viernes, 6 de noviembre de 2009

Sor-Verónica y Des-Esperanza

Parece que una joven monja burgalesa está renovando el mensaje católico para atraer a las jóvenes y lo está haciendo con gran éxito. El caso es que la renovación en cuestión es más bien una vuelta atrás, es decir, un mensaje ultraconservador de "nos hemos pasado de la raya, así que retrocedamos" o "la puerta se ha abierto demasiado, toca cerrojazo". El País Semanal dedicaba un reportaje al respecto. Destaco este párrafo, de periodista Jesús Rodríguez: "Apoyada por el Vaticano, mimada por los monseñores, financiada por los poderosos y jaleada por los movimientos neoconservadores, ha hecho de aquel vetusto convento (el de las Clarisas, en Lerma) un atractivo banderín de enganche para vocaciones femeninas que cuenta con 135 monjas con carrera y una media de edad de 35 años y un centenar más en lista de espera. Y ya ha abierto una sucursal en La Aguilera, a 40 kilómetros", un enorme monasterio en el que ya se han gastado cinco millones de euros y cuenta con una segunda fase de otros tantos. Sor Verónica, al parecer buena predicadora, directora musical y coreógrafa, no habla en el reportaje, a excepción de una frase que suena casi a amenaza: "(...) Estamos creando (...) Estamos haciendo algo grande por amor a Cristo (...)". Y la acción-reacción de la que hablaba al principio la expresa así una de las monjas: "España está tan pagana que hace falta que compartamos nuestra fe, no que la vivamos a solas. Es el momento de actuar".


Si para las monjas de clausura, "es el momento de actuar", ¿qué no será para los políticos en activo que piensan como ellas... como Esperanza Aguirre y su congregación?
Veo muchas similitudes entre el fenómeno sor Verónica y el de Esperanza Aguirre, la mujer que ha hecho una apuesta a vida o muerte para ser la primera presidenta del país y que también va ganando adeptos. Ambas son producto de una crisis (o la están utilizando bien) que se anunció como crisis del sistema, una etapa de sufrimiento de la que saldría una sociedad más limpia, con Estados más fuertes frente al capital, y uno esperaba ver temblar a los directores generales, altos ejecutivos, evasores de dinero negro, grandes defraudadores, habitantes de los paraísos fiscales... Pero parece que la limpieza se está haciendo por debajo, barriendo a millones de viejos y nuevos desempleados para poder cambiarles los muebles a los banqueros y los grandes empresarios.
Es, en suma, una crisis no para dar un paso hacia adelante, sino hacia atrás, política y socialmente. No sé si será por la gripe (la vulgar) que me invade, pero yo veo signos por todas partes del derechazo que se prepara: los veo en la creciente agresividad de la gente al hacer sus críticas, en el cada vez más abierto racismo, en la insolencia y la arrogancia de los políticos mediocres... Todo me hace pensar que la era de Obama y Zapatero va a dar pronto paso a la de las monjas y la desesperanza.

http://www.elpais.com/articulo/portada/milagro/sor/Veronica/elpepusoceps/20091101elpepspor_7/Tes

jueves, 5 de noviembre de 2009

Psicko



Probablemente haya sido la última en verla... no sé... El caso es que he visto "Sicko", de Michael Moore, hace tan sólo dos días en Canal Plus, y he quedado impactada. La recomiendo vivamente. La película trata del sistema sanitario norteamericano: de los 50 millones de estadounidenses que no cuentan con ningún tipo de cobertura médica (porque ninguna aseguradora les acepta) y, sobre todo, de los más de 250 millones que sí tienen un seguro médico con alguna de las grandes compañías, a la que pagan alrededor de 2.000 dólares anuales, pero que, cuando les necesitan, en la mayoría de los casos les deniegan el tratamiento médico. Aunque es un documental de lo más entretenido, te pone realmente de muy mal humor, aunque no es mal consuelo que el país más poderoso del mundo trate a sus ciudadanos de un modo que cualquier español consideraría tercermundista. A pesar de las muchísimas carencias de la Seguridad Social española (el corporativismo médico, la falta de transparencia, los sanitarios incompetentes, las listas de espera, el enchufismo...), no cabe duda de que es un privilegio frente a la crueldad con la que el Estado más privilegiado trata a sus ciudadanos.

http://www.youtube.com/results?search_query=michael+moore+sicko&search_type=&aq=1&oq=Michael+Moore

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Entre lavadora y lavadora

Entre lavadora y lavadora, leo la noticia de que el PSOE y el PP están acordando nuevas leyes que dificulten la corrupción de los políticos. ¡Bienvenidas sean! Pero, en mi opinión, se quedarán cortas, porque no basta con leyes que defiendan a la sociedad de la corrupción de los políticos, sino que nos defiendan de nosotros mismos, que impidan la corrupción social. Quienes hablan de los políticos como si fueran una especie diferente a la humana, ignoran que la corrupción es personal, no profesional; ciertamente, menos tolerable en los políticos, en cuanto que representan a la sociedad, pero nace de ésta. Conozco a unos cuantos políticos, unos corruptos (probadamente o no) y otros que no lo son (pondría la mano en el fuego), y estoy convencida de que su deshonestidad u honradez sería la misma si ejercieran cualquier otra profesión.
El poder no corrompe: sólo facilita la corrupción a mayor escala.
¿Y quién es peor, el corruptor o el corruptible? Cuando se produce un timo, se castiga la mentira del estafador, pero moralmente no es mejor la avaricia del estafado. Ocurre algo parecido con la corrupción.

Conocí de cerca el Caso de la Construcción de Burgos y lo que más me aterró no fue que, con la interesada connivencia del alcalde y un grupo de políticos y funcionarios, el constructor Méndez Pozo hubiera comprado prácticamente la ciudad, sino que había comprado a los propios ciudadanos. La mayor parte de la gente tenía que ver con él: o porque fue el constructor de su casa, parte de la cual había pagado en dinero negro; o porque lo aceptaba como benefactor del equipo de fútbol del colegio de sus hijos o de las víctimas de un atentado terrorista (compró bicicletas a los niños que vivían en la Casa Cuartel), etcétera. De un modo u otro, casi todos habían sido corrompidos, hasta cierto punto, por este gran corruptor.
Sólo así se explica que el alcalde condenado a doce años de inhabilitación, José María Peña, siga teniendo actividad política, y que Méndez Pozo, condenado a siete años de prisión, cumpliera nueve meses que sólo sirvieron para que, desde la tranquilidad de la celda, multiplicara sus negocios (sobre todo en medios de comunicación) y saliera con un poder económico y mediático tal que no sólo recuperó su influencia política sino que la ha hecho infinitamente mayor (ejemplo: los príncipes de Asturias inauguraron recientemente la sede de su grupo de comunicación, Promecal) y se haya perpetuado en su hijo.

Urgen leyes rígidas que aparten las manos sucias del dinero público, pero no sólo para mantener limpia la caja, sino para que cunda una conciencia social de mayor limpieza, para que se extienda una mentalidad de intolerancia (¿por qué decir "tolerancia cero"?) a las corruptelas públicas y privadas, porque los chanchullos de los administradores sirven para justificar los de los administrados y de éstos es de donde surgen nuevos administradores.
Yo creo que a la política se llega ya corrupto o con ganas de corroperse. Los políticos que ponen el cazo, los empresarios de maletines, han sido ciudadanos de los que, por ejemplo, ponen el grito en el cielo por los impuestos pero defraudan a las arcas públicas o funcionarios que no hacen nada por ganarse el sueldo que salen de esas arcas.
Una sociedad más limpia sería, en suma, más exigente, y no sólo clamaría por abrir la prisión a unos cuantos políticos, sino también a varios banqueros, jueces, abogados y periodistas.
En fin, ¡a la lavadora todos los trapos sucios!